Nuestro Sol es una enorme bola de gas caliente cargada eléctricamente. Este gas cargado se mueve, generando un potente campo magnético. El campo magnético del Sol pasa por un ciclo, denominado el ciclo solar.

Cada 11 años más o menos, el campo magnético del Sol cambia completamente. Esto implica que los polos norte y sur del Sol cambian de lugar. Después, ¡se demoran unos 11 años más para que los polos norte y sur del Sol vuelvan de nuevo!

El ciclo solar afecta la actividad en la superficie del Sol, como las manchas solares causadas por los campos magnéticos del Sol. A medida que los campos magnéticos cambian, también lo hace la cantidad de actividad en la superficie del Sol.

¿Cómo se lleva la cuenta del ciclo solar?

Una forma de llevar la cuenta del ciclo solar es contando el número de manchas solares. La actividad solar y el número de manchas solares aumenta con el tiempo. Por ejemplo:

  • El comienzo de un ciclo solar es un mínimo solar, es decir, cuando el Sol tiene menos manchas solares.
  • La mitad del ciclo solar es el máximo solar, es decir, cuando el Sol tiene la mayor cantidad de manchas solares.
  • A medida que el ciclo termina, vuelve al mínimo solar y comienza un nuevo ciclo.

Imagen del sol durante un ciclo solar. El máximo solar ocurrió durante 2001, mientras que 1996 y 2006 estuvieron cerca del mínimo solar. Crédito de imagen: NASA

Las erupciones gigantes en el Sol, como las erupciones solares y las eyecciones de masa coronal, también aumentan durante el ciclo solar. Estas erupciones envían poderosos golpes de energía y material al espacio.

¿Lo podemos presenciar aquí en la Tierra? ¿Cómo?

Esta actividad puede tener efectos en la Tierra. Por ejemplo, las erupciones pueden causar luces en el cielo, llamadas aurora, o impactar las comunicaciones radiales. Las erupciones extremas pueden incluso afectar las redes eléctricas en la Tierra.

Imagen de una eyección de masa coronal observada por Observatorio Solar y Heliosférico de la NASA, o SOHO, satélite en 2001. Crédito: ESA/NASA/SOHO

Clima espacial

Algunos ciclos tienen máximos con muchas manchas solares y actividad. Otros ciclos pueden tener muy pocas manchas solares y poca actividad. Los científicos trabajan arduamente para mejorar nuestra capacidad de predecir la fuerza y la duración de los ciclos solares. Estas predicciones pueden ayudarles a pronosticar estas condiciones solares, llamadas clima espacial.

El pronóstico del ciclo solar puede ayudar a los científicos a proteger nuestras comunicaciones radiales en la Tierra, y ayudar a mantener seguros a los satélites y astronautas de la NASA.

Tim Kopra, astronauta de la NASA, en una caminata espacial 2015 fuera de la Estación Espacial Internacional. Crédito: NASA

La actividad solar puede afectar la electrónica satelital y limitar su vida útil. La radiación puede ser peligrosa para los astronautas que trabajan fuera de la Estación Espacial Internacional. Si los científicos predicen un tiempo activo en el ciclo solar, los satélites pueden ponerse en modo seguro y los astronautas pueden retrasar sus caminatas espaciales.