Representación artística de una de las naves espaciales Voyager. Crédito: NASA
Dos naves espaciales fueron nuestros fotógrafos
La NASA tiene asombrosas fotografías de cada planeta de nuestro sistema solar. Incluso tenemos imágenes de Neptuno, el cual, está demasiado lejos para que un astronauta viaje hasta allí con una cámara. Entonces, ¿cómo tenemos imágenes de lugares tan lejanos de nuestro sistema solar? Esto es gracias a las ¡Voyager 1 y Voyager 2!
Imagen de Neptuno tomada por la nave espacial Voyager 2. Crédito: NASA
¡Una gran hazaña!
Las naves espaciales Voyager 1 y Voyager 2 fueron lanzadas desde la Tierra en 1977. Su misión fue explorar Júpiter y Saturno, y planetas que se encuentran más allá de nuestro sistema solar. Ningún objeto hecho en el pasado por el ser humano, había intentado un viaje así.
Las dos naves espaciales tomaron miles de imágenes de Júpiter y Saturno. Las imágenes del Voyager 1 y 2 nos permitieron ver muchas cosas por primera vez. Por ejemplo, capturaron fotos a detalle de las nubes y tormentas de Júpiter, y la estructura de los anillos de Saturno.
Imagen de las tormentas en Júpiter tomadas por la nave espacial Voyager 1. Crédito: NASA
Voyager 1 y 2 también descubrieron volcanes activos en Io, una de las lunas de Júpiter, y mucho más. Voyager 2 también tomó imágenes de Urano y Neptuno. En conjunto, la misión Voyager descubrió 22 lunas.
Desde entonces, estas astronaves continúan su viaje alejándose de nosotros. Voyager 1 y 2 están ahora tan lejos que han llegado al espacio interestelar, ¡ninguna otra nave espacial ha viajado tan lejos!
Ambas naves espaciales continúan enviando información de regreso a la Tierra. Estos datos nos ayudarán a entender acerca de las condiciones en el distante sistema solar y el espacio interestelar.
Los Voyager tienen suficiente combustible y energía para operar hasta el 2025 y más allá. Después de algún tiempo de esto, ya no podrán comunicarse con la Tierra. A menos que algo los detenga, continuarán pasando por nuevas estrellas una y otra vez por muchos miles de años.
Ambas naves contienen un mensaje
Cada nave espacial Voyager llevaban consigo un disco de oro con escenas y sonidos de la Tierra. Los discos también contienen música y saludos en diferentes idiomas. Por lo cual, si alguna vez vida inteligente encuentra estas naves espaciales, ¡podrán saber acerca de la Tierra y de nosotros! ¿Te lo imaginas?
Foto del disco de oro que se envió al espacio en ambos Voyagers 1 y 2. Crédito: NASA/JPL-Caltech