Cuando el robot de caza de agua de la NASA, el Volatiles Investigating Polar Exploration Rover, o VIPER, llegue a la superficie lunar, utilizará dos rampas plegables para salir del módulo de aterrizaje con estilo y comenzar a explorar la Luna. Para asegurarse de que su gran momento transcurra sin problemas, el equipo VIPER recientemente probó esas rampas en el Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston.

Utilizando un modelo a gran escala del módulo de aterrizaje Griffin que entregará VIPER a la Luna, el equipo evaluó qué tan bien una unidad de prueba de rover podía moverse en las rampas. Los resultados mostraron formas en que el socio de la NASA, Astrobotic of Pittsburgh, puede modificar los diseños de las rampas. Esto asegurará que el rover pueda maniobrar sobre ellos, manteniendo sus ruedas dentro de las barandillas, por ejemplo, y hacer una salida impecable hacia la Luna.

También se probaron diferentes materiales en la superficie de las rampas. Estas pruebas ayudarán a informar a los diseñadores sobre las cualidades que ayudan a que las ruedas del rover se muevan de manera suave y segura. VIPER descendió con éxito las rampas sobre una superficie de aluminio texturizada, papel de lija de alta fricción y un elastómero de alta fricción, un polímero con propiedades elásticas.

Con su lanzamiento en 2023, VIPER explorará el Polo Sur de la Luna y mapeará su superficie en busca de agua y otros recursos. Astrobotic proporcionará el módulo de aterrizaje Griffin y la entrega de VIPER a la superficie lunar a través de la iniciativa Commercial Lunar Payload Services .

Crédito de la foto: NASA / Johnson Space Center / James Blair

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