La nave espacial Voyager 2 de la NASA está sola y a la deriva a través del espacio interestelar, después de que una falla en las comunicaciones la dejará incapaz de recibir comandos o transmitir datos a la Tierra.

La buena noticia es que la distante nave envió una señal de “latido del corazón” a la Tierra.

 

Voyager tiene solo cuatro kilobytes de almacenamiento a bordo  (REUTERS/NASA/JPL-Caltech/Handout)

 

Lanzada en 1977 para explorar los planetas exteriores y servir como un faro de la humanidad para el universo más amplio, la sonda actualmente se encuentra a más de 19.900 millones de kilómetros de nuestro planeta, mucho más allá del sistema solar.

Los controladores de la misión dejaron de tener noticias de la Voyager 2, después de enviar un comando defectuoso que inclinó su antena para apuntar a dos grados de la Tierra. El pequeño cambio de orientación fue suficiente para cortar todo contacto con la sonda.

Así, una serie de comandos planificados enviados a la Voyager 2, el 21 de julio, “inadvertidamente hicieron que la antena apuntara a dos grados de la Tierra”, dijo el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA en una actualización reciente. Esto la dejó incapaz de transmitir datos o recibir comandos a su control de misión, una situación que no se esperaba que se resolviera hasta que realizó una maniobra de reorientación automatizada el 15 de octubre.

Pero en las últimas horas, la directora del proyecto Voyager, Suzanne Dodd, confirmó que el equipo contó con la ayuda de Deep Space Network, un conjunto internacional de antenas de radio gigantes, además de algunas que orbitan la Tierra, en un último esfuerzo por restablecer el contacto antes.

Para su sorpresa, “esto tuvo éxito porque vemos la señal del ‘latido del corazón’ de la nave espacial”, dijo. “Entonces sabemos que la nave espacial está viva y en funcionamiento. Esto animó nuestros espíritus”, precisó la experta.

 

Los números de Voyager 2 en 2022, según la NASA: 1 de 2 naves interestelares, 11 mil millones de millas del sol (18 mil millones de KM), 41 años en el espacio, 290 millones de millas cada año, 1 disco dorado, 18.5+ de mil millones totales de millas viajadas (30 mil millones de Km), 34,191 MPH (aproximado al Sol), 4 planetas visitados (Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno), y 16 horas y 36 minutos de tiempo de luz unidireccional de la Tierra a la nave espacial.

Los números de Voyager 2 en 2022, según la NASA: 1 de 2 naves interestelares, 11 mil millones de millas del sol (18 mil millones de KM), 41 años en el espacio, 290 millones de millas cada año, 1 disco dorado, 18.5+ de mil millones totales de millas viajadas (30 mil millones de Km), 34,191 MPH (aproximado al Sol), 4 planetas visitados (Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno), y 16 horas y 36 minutos de tiempo de luz unidireccional de la Tierra a la nave espacial.
 

“La señal de la Voyager 2, que ahora está a más de 12 mil millones de millas de la Tierra, fue detectada durante un escaneo de rutina del cielo”, dijo la NASA, y confirmó que la nave espacial todavía está transmitiendo.

Pero si bien los ingenieros ahora pueden ver un latido del corazón, en términos técnicos, la onda portadora asociada con la Voyager 2 aún no pueden leer la señal de información que da forma a la onda portadora, que transmite todos los datos recopilados por la nave espacial.

“Ahora estamos generando un nuevo comando para intentar apuntar la antena de la nave espacial hacia la Tierra”, agregó Dodd, aunque dijo que solo hay una “baja probabilidad” de que funcione. Aun así, dado que el 15 de octubre está muy lejos, la NASA seguirá intentando enviar estos comandos. La nave espacial está tan lejos que incluso a la velocidad de la luz, los comandos de software enviados desde la Tierra tardan 18 horas en llegar a la sonda.

 

Si alguna vez has viajado a algún lugar que te dejó tan cautivado que querías volver una y otra vez, entonces entiendes cómo se siente Peggy Whitson sobre el espacio.

Peggy es una astronauta experimentada que tiene múltiples logros en su carrera: fue la primera mujer en comandar la Estación Espacial Internacional, y en 2017 rompió el récord de la mayor cantidad de días acumulados en el espacio de cualquier astronauta estadounidense y mujer, con un conteo de 665.

Se retiró de la NASA hace casi cinco años, pero el mes pasado, a los 63 años, empacó el collar que usó el día de su boda, se puso de nuevo su traje espacial y tomó un vuelo en una cápsula SpaceX como comandante de la misión Ax-2. El vuelo fue patrocinado por una empresa privada, Axiom Space, además el vuelo contó con tres miembros más.

Después de regresar a la Tierra, Whitson habló con All Things Considered, y compartió algunas ideas sobre el futuro de la exploración espacial. Hoy te contaremos lo que dijo: 

 

 

1. La exploración espacial será una mezcla de dinero público y privado

Si observas incluso las misiones de la NASA que regresan a la luna, muchas compañías espaciales privadas diferentes están involucradas en ese proceso. Y eso incluye a Axiom Space, por ejemplo, que está construyendo los trajes espaciales que usarán los astronautas de la NASA cuando vuelvan a pisar la luna. Por eso es emocionante ser parte de esta filosofía cambiante del espacio y los esfuerzos de empresas comerciales como Axiom Space. 

Ahora podemos ver una relación mundial entre diferentes empresas y personas, y eso es lo que hace que sea un momento tan especial para ser parte de la misión [Ax-2], porque la exploración espacial está cambiando de sabor y es emocionante porque habrá muchas más oportunidades en el futuro.

 

 

2. Más personas podrán ir al espacio
 
Obviamente, se necesitará tiempo para que el costo no sea prohibitivo, pero el hecho de que estemos tomando esos pasos iniciales es realmente importante ahora. Si miras hacia atrás en la aviación comercial y cómo ocurrió y el desarrollo de ese proceso, también comenzó con solo unas pocas personas involucradas y luego más y más, y ahora es bastante común.
 
 
Second Axiom Private Astronaut Mission Launching Live on NASA TV – Space  Station 
 
 
3. Los objetivos dependerán del país
 
El objetivo de cada misión es ligeramente diferente, pero en cada una podemos encontrar que la tripulación casi siempre, tiene objetivos por separado, mientras unos se encargan de cuidar al equipo y monitorear su salud hay otros que suben a la ISS a desarrollar nuevas investigaciones de divulgación de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) para educadores en el futuro.  Los objetivos de la tripulación no son necesariamente muy diferentes a los de una misión de la NASA, que es divulgación e investigaciones científicas, pero estas tienen los objetivos específicos de expandir la divulgación en áreas específicas e inspirar a la juventud.

La empresa del millonario británico Richard Branson realizó una increíble hazaña en la nave VSS Unity.

El avión espacial VSS Unity de la compañía espacial privada Virgin Galactic completó con éxito su primer vuelo suborbital comercial. A bordo, tres investigadores italianos llevaron a cabo experimentos biológicos y físicos.

 

Eve.

 

Virgin Galactic se especializa en vuelos suborbitales turísticos y utiliza el avión espacial VSS Unity, diseñado para transportar hasta cuatro pasajeros y dos pilotos. El vehículo es soltado desde un avión de transporte que se eleva por encima de los 80 kilómetros, considerando el límite del espacio según la Fuerza Aérea de EE.UU.

La compañía obtuvo el permiso oficial para realizar vuelos comerciales el año pasado, tras lo cual su fundador, Richard Branson, realizó un vuelo suborbital. En total, se ejecutaron cinco vuelos de prueba antes del vuelo comercial de Galactic 1.

 

Tripulación

Los tripulantes de este vuelo fueron el exoficial de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, Michael Musucci, y el antiguo piloto de la Fuerza Aérea italiana, Nicola Pecile.

Además, el coronel Walter Villadei, llevó un traje inteligente biométrico para medir sus respuestas fisiológicas mientras exploramos los límites del espacio. Y Angelo Landolfi, se encargó de la evaluación del rendimiento cognitivo y el comportamiento corporal en un entorno de microgravedad. ¡Un equipo excepcional para una aventura sin precedentes!

Sus objetivos:

  • Conducir 13 experimentos tripulados y autónomos para examinar biomedicina termodinámica de fluidos. Así como el desarrollo de materiales sustentables e innovadores para condiciones de microgravedad.

  • Recopilar datos a través de sensores y cargas útiles portátiles, y mediante cargas útiles autónomas montadas en la cabina del sistema de bastidor de carga útil de Virgin Galactic.

 

Una hazaña sin igual

El 29 de junio a las 8:30 hora local comenzó el primer vuelo comercial que recibió la designación de «Galactic 01». El VSS Unity despegó del puerto espacial América en Nuevo México y, luego de encender sus cohetes, se separó de la nave nodriza, alcanzando una altitud de 85,1 kilómetros.

Posteriormente, regresó al puerto espacial a las 9:42 hora local y aterrizó con éxito. El vuelo fue ordenado por la Fuerza Aérea Italiana y el Consejo Nacional de Investigación de Italia. A bordo del avión se encontraban tres investigadores italianos y un instructor de astronautas de la compañía.

«Fue un viaje hermoso», dijo el coronel Walter Villadei en una conferencia de prensa. Además, mencionó que su momento favorito fue contemplar el contraste entre el color negro del espacio y el planeta debajo.

Villadei compartió la cabina con el teniente coronel Angelo Landolfi de la Fuerza Aérea Italiana, Pantaleone Carlucci del Consejo Nacional de Investigación de Italia y Colin Bennett de Virgin Galactic.

La tripulación del Galactic 01 realizó 13 experimentos supervisados y autónomos, recopilando datos sobre sus trajes y sensores en la cabina. Estos experimentos incluyeron la medición de los niveles de radiación en la poco estudiada mesosfera y la observación de la mezcla de ciertos líquidos y sólidos en microgravedad.

 

 

El futuro de los vuelos comerciales

Virgin Galactic, fundada en 2004, ha vendido alrededor de 800 boletos para asientos en futuros vuelos comerciales. Los primeros en comprar boletos para visitar el límite del espacio fueron millonarios y estrellas de cine. Sin embargo, estos vuelos también pueden tener objetivos científicos, como trabajos en microgravedad.

Villadei explicó que actualmente los investigadores interesados en trabajar en microgravedad solo tienen dos opciones. La primera son los vuelos en aviones parabólicos, donde los pasajeros experimentan unos segundos de ingravidez, y la segunda son las misiones a la Estación Espacial Internacional, que duran seis meses.

De esta manera, Virgin Galactic ofrece un servicio que se sitúa entre las otras dos opciones menos convenientes. Por otro lado, el tamaño del avión espacial permite realizar experimentos más grandes de los que se podrían llevar a cabo en un cohete.

La empresa ya tiene la mirada puesta en el futuro. La próxima misión, Galactic 02, está programada para agosto, y se espera que estos vuelos espaciales se realicen mensualmente. Con suerte, todo transcurrirá sin contratiempos significativos.