El orbitador europeo empleó su Sistema de Imágenes de Superficie en Color y Estéreo (CaSSIS) para descubrir depósitos de sal de cloruro en la región llena de cráteres de Terra Sirenum en Marte.
 
La ESA localiza depósitos de sal en un antiguo cauce marciano
 

El orbitador marciano TGO (Trace Gas Orbiter) de la ESA ha revelado la presencia de depósitos de sal de cloruro en la región llena de cráteres conocida como Terra Sirenum (Mar de las Sirenas, en latín).

Marte, que hoy es un mundo desértico, estaba cubierto hace unos 3,500 millones de años por ríos, lagos e incluso océanos. Sin embargo, cuando el planeta perdió su campo magnético, no pudo mantener su atmósfera, lo que causó que el agua se evaporara, se congelara o quedara atrapada en la superficie. A medida que el agua desaparecía, dejaba rastros minerales, como los depósitos de sal que ahora se han identificado en el lecho seco de un antiguo río en el hemisferio sur del planeta.

El orbitador europeo utilizó su Sistema de Imágenes de Superficie en Color y Estéreo (CaSSIS) para detectar estos depósitos de cloruro en Terra Sirenum. Se cree que estas sales se formaron a partir de estanques poco profundos de agua o salmuera que se evaporaron bajo el Sol, un proceso similar al que se utiliza en la Tierra para producir sal en piscinas de agua salada.

 

ESA localiza depósitos de sal en un antiguo cauce marciano | Proceso

 

Este descubrimiento es significativo porque las aguas muy saladas podrían haber sido un refugio para la vida en Marte. Las altas concentraciones de sal permiten que el agua permanezca líquida a temperaturas tan bajas como -40 ºC, lo que hace que áreas como Terra Sirenum sean objetivos prometedores para futuras misiones en busca de signos de vida.

El cloruro no es visible en las imágenes normales en blanco y negro, pero aparece en un tono púrpura distintivo en las imágenes infrarrojas en color, lo que convierte a CaSSIS en una herramienta única para estudiar la distribución de sales en Marte.

Esta investigación, publicada en la revista Scientific Data de Nature, incluye datos inéditos que nos ayudan a comprender mejor cómo se distribuía el agua en Marte durante su pasado distante.

Funcionarios de la agencia reconocieron que los problemas podrían ser más serios de lo que se creía inicialmente, y que, al final, es posible que los astronautas no regresen en la nave de Boeing.

 

A la deriva: La NASA retrasa la decisión sobre los astronautas varados en  el espacio

 

El miércoles pasado, funcionarios de la NASA reconocieron que los problemas podrían ser más serios de lo que se pensaba, y que podría ser que los astronautas no regresen en la nave de Boeing.

La agencia está considerando una alternativa para que los astronautas Suni Williams y Butch Wilmore regresen a la Tierra a bordo de una nave espacial construida por SpaceX, la empresa competidora de Boeing.

La estancia de los astronautas en órbita, que inicialmente iba a durar solo ocho días, podría extenderse hasta el próximo año.

"Podríamos optar por cualquiera de las dos alternativas", mencionó Ken Bowersox, administrador asociado de la NASA para la dirección de misiones de operaciones espaciales, durante una conferencia de prensa el miércoles. "Y personas razonables podrían decidirse por cualquiera de esas opciones".

Estas declaraciones agravan los problemas y situaciones para Boeing, un gigante aeroespacial que tiene contratos por miles de millones de dólares con el gobierno federal estadounidense y que fabrica aviones comerciales que operan en todo el mundo.

Además de los desafíos que enfrenta la división de aviación civil de la compañía, tras la explosión de parte del fuselaje de un 737 durante un vuelo en enero, Boeing anunció el 1 de agosto que cancelaría 125 millones de dólares en costos imprevistos del programa Starliner, sumándose a los 1500 millones de dólares en cancelaciones anteriores.

Tanto funcionarios de la NASA como de Boeing habían asegurado que los astronautas que viajaron en la Starliner durante su primer vuelo de prueba tripulado no estaban varados en el espacio. Williams y Wilmore llevan dos meses a bordo de la estación espacial, mientras los ingenieros continúan analizando los datos sobre el mal funcionamiento de varios propulsores de la Starliner durante su aproximación para acoplarse, así como de varias fugas de helio.

La NASA suele enviar un contingente de cuatro astronautas a la estación espacial cada seis meses para sustituir a una tripulación anterior de astronautas que luego regresan a la Tierra.

 

Las fallas en la Starliner que tiene varados en el espacio a dos astronautas  - InfoYa

 

Según el plan de contingencia, la próxima cápsula Crew Dragon de SpaceX viajaría a la estación espacial con solo dos astronautas en lugar de cuatro. Williams y Wilmore se unirían entonces como miembros de pleno derecho de la tripulación de la estación espacial para una estancia de medio año, y regresarían en la Crew Dragon en febrero del próximo año.

"En las últimas semanas, hemos decidido asegurarnos de que tenemos esa capacidad, ya que nuestra comunidad se sentía cada vez más incómoda", comentó Steve Stich, gerente del programa de tripulación comercial de la NASA.

Stich añadió que aún no se ha tomado una decisión final, pero que esto tendría que resolverse a mediados de este mes.

Un punto de inflexión fue la prueba en tierra de un propulsor similar, realizada en las instalaciones de la NASA en White Sands, Nuevo México.

El propulsor mostró una notable degradación después de las pruebas. "Fue una sorpresa para nosotros", comentó Stich. "Y diría que eso aumentó nuestro nivel de incomodidad".

Al parecer, la acumulación de calor provocó que las juntas de teflón del propulsor se abombaran, restringiendo así el flujo de propulsante.

Otra prueba, que consistió en disparar brevemente los propulsores de la Starliner en órbita, transcurrió sin problemas. De hecho, incluso los propulsores que habían perdido una cantidad significativa de empuje funcionaron casi con normalidad.

Sin embargo, esto desconcertó a los ingenieros, quienes no lograban entender cómo las juntas de teflón podían volver a su forma original, lo que generó dudas sobre si habían pasado por alto algún otro problema con los propulsores defectuosos.

"No podemos demostrar con total certeza que lo que observamos en órbita es exactamente lo mismo que se ha reproducido en tierra", explicó Stich. "Realmente queremos entender la física de lo que está ocurriendo".

 

Lo que se sabe de los astronautas varados en el espacio

 

Esto llevó a la NASA a trabajar con mayor diligencia en su plan de contingencia.

Ese plan incluye identificar trajes espaciales Crew Dragon que se ajusten a Williams y Wilmore, y preparar la nave para lanzarse con menos pasajeros, sustituyendo el peso de los astronautas ausentes con lastre en los asientos vacíos.

Stich se negó a revelar cuáles de los dos astronautas programados para la misión Crew-9 perderían su oportunidad de volar si se lleva a cabo el plan alternativo.

Si la NASA decide avanzar con este plan, la Starliner regresaría a la Tierra a principios de septiembre sin tripulación a bordo, liberando así un puerto de acoplamiento en la estación espacial para los astronautas de la Crew Dragon. Posteriormente, una Crew Dragon que actualmente está acoplada a la estación espacial regresaría con cuatro astronautas, concluyendo su estancia en la estación.

Con el retraso de la próxima misión a la estación espacial, los siguientes en alcanzar la órbita podrían ser cuatro astronautas privados liderados por el empresario Jared Isaacman, en una misión no antes del 26 de agosto. Esta misión, llamada Polaris Dawn, llevará a Isaacman y a su tripulación a una órbita de 1,400 kilómetros sobre la Tierra, lo más lejos que alguien ha estado desde las misiones lunares Apolo de la NASA hace más de cinco décadas. Además, dos miembros de la tripulación podrían intentar realizar el primer paseo espacial comercial.

La Starliner no es la única nave espacial que ha tenido problemas en su ruta hacia la estación espacial este verano. Cygnus, una nave de carga de Northrop Grumman, despegó el domingo. Sin embargo, el encendido de los motores para ponerla en trayectoria hacia la estación espacial fue cancelado debido a la baja presión en el sistema de propulsión. Tras analizar las lecturas, los ingenieros de Northrop Grumman concluyeron que la presión era adecuada y reprogramaron el encendido de los motores. Cygnus llegó a la estación espacial a primera hora del martes, a la hora prevista inicialmente.

Como los agujeros en un queso suizo, un túnel se oculta bajo la superficie lunar. Este descubrimiento promete abrir la puerta a estancias prolongadas en nuestro satélite.

La Luna, nuestro vecino celestial más cercano, sigue siendo uno de los grandes enigmas del espacio. A pesar de su proximidad a la Tierra, aún hay incontables preguntas sin respuesta. Recientemente, la NASA ha revelado la existencia de túneles subterráneos en la Luna, los cuales podrían ser cruciales para que los astronautas puedan pasar largas temporadas tanto en su superficie como en su interior. Esto es lo que sabemos hasta ahora.

 

La NASA confirma la existencia de túneles en la Luna

 

Después de medio siglo

Durante al menos 50 años, la ciencia ha debatido la existencia de túneles en la superficie lunar. Sin saber con certeza su contenido o si son reales, se ha teorizado sobre su posible origen, composición y, sobre todo, utilidad. Ahora, un nuevo estudio publicado por Nature Astronomy ofrece información reveladora sobre el pozo lunar Mare Tranquillitatis. Explorando por el Lunar Reconnaissance Orbiter de la NASA, este agujero en la superficie lunar ha resultado ser un túnel de lava.

"Gracias al análisis de la información, pudimos crear un modelo del conducto," explica Leonardo Carrer, investigador de la Universidad de Trento en Italia. "La explicación más viable es que se trate de un tubo de lava vacío."

 

Confirman por primera vez que la Luna tiene túneles subterráneos | WIRED

 

Un entorno inhóspito

A unos 400 kilómetros del sitio de aterrizaje del Apolo, el Mare Tranquillitatis se destaca como una región lunar clave para la exploración de refugios cavernosos. Según el investigador Bruzzone, aunque hay indicios científicos de fosas o cuevas en los polos lunares, la mayoría de las pruebas se han encontrado en los mares lunares y en áreas con historia de actividad volcánica. Aunque no se conoce el número exacto de estas estructuras, se estima que la Luna podría albergar cientos de cuevas y miles de tubos de lava distribuidos por su superficie.

Los hallazgos del estudio proporcionan información crucial sobre la geología lunar y su relevancia potencial para futuras misiones tripuladas a la Luna. La superficie lunar presenta un entorno extremadamente inhóspito para la vida humana, con temperaturas que oscilan entre los 127°C en la cara iluminada y los -173°C en la cara oculta, además de la intensa radiación cósmica y solar, y la constante amenaza de impactos de meteoritos.

"Es importante destacar que abordar los desafíos para construir una base lunar en la superficie requeriría soluciones de ingeniería muy complejas, potencialmente menos efectivas que las que ofrece naturalmente el entorno de las cuevas. La creación de un hábitat lunar dentro de una cueva ofrece ventajas significativas en comparación con la construcción en la superficie, incluyendo la protección contra la radiación cósmica y solar, estabilidad térmica (dado que las cuevas mantienen temperaturas estables frente a las variaciones extremas en la superficie), defensa contra micrometeoritos y acceso potencial a recursos como hielo de agua y minerales", explica Leonardo Carrer, profesor de la Universidad de Trento y coautor del estudio.

 

La NASA confirma la existencia de túneles bajo la superficie de la Luna

 

¿Posible base lunar?

El pozo ubicado en Mare Tranquillitatis es uno de los más profundos conocidos en la Luna. Esta estructura es lo suficientemente grande como para permitir la detección de características internas con la alta resolución proporcionada por el radar del Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO).

Aunque las simulaciones indican que las dimensiones de la cueva no serían suficientes para albergar una ciudad, los investigadores consideran que es lo bastante amplia como para servir de base lunar. Existen numerosas ventajas significativas para la construcción de una base lunar en una cueva como la recién descubierta.

Según los investigadores, una cueva proporciona mejor protección contra los rayos cósmicos y la radiación solar, peligrosos para los humanos y constantemente presentes en la superficie lunar. Además, ofrece estabilidad térmica con temperaturas más consistentes, así como protección natural contra micrometeoritos gracias a las rocas que forman la cueva.