Zhurong el rover chino comienza a recorrer Marte
El Zhurong salió de la sonda Tianwen-1, que se posó hace una semana en el Planeta Rojo, marcando un hito en el programa espacial chino.
El primer astromóvil llevado por China hasta Marte comenzó el sábado 22 de mayo a explorar la superficie del Planeta Rojo, una semana después de que la sonda en la que viajaba se posara en ella, informaron las autoridades del país asiático. El vehículo salió de su plataforma de aterrizaje y comenzó a explorar la superficie, lo que convierte a China en el segundo país en lograrlo.
El lanzamiento de la sonda Tianwen-1 a Marte, que llevaba el róver Zhurong, marcó un hito en el programa espacial chino. Tianwen-1 aterrizó en una vasta llanura de lava en el norte, conocida como Utopia Planitia, hace una semana y transmitió sus primeras fotos de la superficie unos días después. Según la Administración Nacional del Espacio de China (ANEC).
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El Zhurong, de seis ruedas, impulsado por energía solar y de 240 kilos, lleva el nombre de un mítico dios chino del fuego. Puede alcanzar una velocidad máxima de unos 200 metros por hora y puede superar obstáculos de hasta 30 centímetros, así como subir cuestas de hasta 20 grados de inclinación. Se espera que la sonda y el vehículo pasen unos tres meses tomando fotos, recopilando datos geográficos y recogiendo y analizando muestras de rocas.
Un nuevo róver en Marte
Zhurong explorará la zona, iniciando una misión primaria que durará tres meses. Sin embargo, el vehículo podría seguir funcionando más allá de esta meta conservadora. Los róveres Spirit y Oportunity, que funcionan con energía solar, tuvieron misiones primarias de unos 90 días y ambos acabaron explorando Marte durante años.
Utopia Planitia, Marte
Utopia Planitia, considerada la ubicación de un antiguo mar, tiene capas sedimentarias que podrían contener evidencias de agua.
El róver Zhurong transporta un conjunto de seis instrumentos. Dos cámaras panorámicas y un generador de imágenes multiespectrales proporcionarán información sobre el terreno y su composición, mientras que un instrumento con un láser vaporizará rocas para analizar su composición, de forma similar a los espectrómetros láser a bordo del Curiosity y el Perseverance. Un magnetómetro medirá los campos magnéticos junto con un instrumento en el orbitador y una estación meteorológica medirá la atmósfera, la temperatura, la presión, el viento y el sonido de Marte.
Uno de los instrumentos más emocionantes a bordo del róver es un georradar, que se empleará para buscar embolsamientos de agua o hielo bajo la superficie.
El georradar del Zhurong rastreará la superficie en dos frecuencias diferentes y captará datos de eco de los estratos subyacentes, estudiando hasta 10 metros de profundidad en busca de hielos o aguas salobres bajo el suelo.
Recreación artística de la sonda china Tianwen-1 posándose en Marte
Es probable que la Tianwen-1 pueda explorar y detectar cualquier nieve y hielo bajo la superficie empleando su carga útil. Dichos embolsamientos de hielo podrían ser valiosos para futuras misiones tripuladas y cualquier embolsamiento de agua o salmuera, protegido de la radiación de la superficie, podría proporcionar hábitats para formas de vida simples.
La misión también sentará las bases para el próximo viaje de China a Marte, un audaz intento de recuperación de muestras cuyo lanzamiento está programado para 2028. Además de Marte, el país planea lanzar una sonda a Júpiter, una misión que incluye un posible aterrizaje en la luna Calisto, también se planea tomar muestras de un asteroide próximo a la Tierra y enviar un par de sondas similares a las Voyager a los confines del sistema solar.
Investigaciones en Marte revelan datos significativos de su núcleo
Finalmente tenemos el mapa más completo de la estructura de Marte hasta la fecha, capa a capa, desde el manto hasta llegar al mismísimo núcleo. Hasta el momento, los rovers y orbitadores que se habían enviado a Marte se centraron en su superficie, pero el sismómetro del módulo de aterrizaje estacionario de InSight ha permitido a los investigadores estudiar en profundidad el interior del planeta.
Los investigadores publicaron una serie de tres artículos en Science en los que, usando los datos del sismómetro, han podido analizar detalles la profundidad de cada capa, la composición de la corteza, el mando y el núcleo de Marte y han podido determinar que el núcleo está fundido.
El sismómetro de InSight, SEIS (Seismic Experiment for Interior Structure o Experimento sísmico para estructura interior) ha registrado 733 movimientos sísmicos. De ellos, unos 35 fueron de magnitudes 3.0 y 4.0 y han sido los que han ofrecido los datos para los artículos.
¿Por qué? La velocidad y forma de las ondas sísmicas varían cuando son transportadas por diferentes materiales dentro de un planeta. Si conseguimos entender cómo varían dichas ondas, podremos conocer qué profundidad y composición tiene cada capa.
En la Tierra los terremotos que sentimos son causados por el desplazamiento de las placas tectónicas. Marte, sin embargo, no tiene placas tectónicas. Su corteza es un "plato gigante", describe la NASA. Sin embargo, en ese "plato" se forman fallas y fracturas debido a las "tensiones causadas por la ligera contracción del planeta a medida que continúa enfriándose".
Sismograma de un sismo en Marte que ocurrió el 25 de julio de 2019. - Imagen: NASA/JPL-Caltech
¿Entonces qué pasa en Marte? Después de analizar estos "martemotos", la NASA afirma que Marte está compuesto por tres capas: corteza, manto y núcleo:
Corteza: es más delgada de lo esperado y podría tener dos o incluso tres subcapas. Su espesor es de 20 kilómetros si hay dos subcapas o de 37 kilómetros si hay tres capas. La NASA afirma que es probable que sea rica en elementos radioactivos que ayuden a "calentar esta capa a expensas del interior".
Manto: Con una profundidad de 1.560 kilómetros. Está compuesto por una sola capa de roca con una litosfera sólida de entre 400 y 600 kilómetros. Nada mal, sobre todo si tenemos en cuenta que la litosfera de la Tierra tiene 100 kilómetros de espesor. También podría ser rica en elementos productores de calor.
Núcleo: Cuenta con un radio es de 1.830 kilómetros. La NASA confirma que el núcleo está fundido, aunque dado su tamaño, es posible que su densidad sea más baja de lo que se esperaba. Se estima que podría tener elementos como azufre, oxígeno, carbono, hidrógeno, hierro y níquel.
Según la NASA, estos resultados son solo el comienzo. "Los científicos ahora tienen datos sólidos para refinar sus modelos de Marte y su formación, y el sismómetro detecta nuevos terremotos todos los días". Los científicos siguen a la espera de detectar un terremoto mayor que 4.0, ya que "tenemos que hacer un gran procesamiento cuidadoso para extraer las cosas que queremos de estos datos. Tener un evento más grande facilitaría todo esto".
La búsqueda de vida en el espacio
¿Alguna vez te has preguntado si estamos solos en el universo? Hasta ahora, la única vida que conocemos está aquí en la Tierra.
Para poder dar explicación a esta pregunta la NASA está explorando el sistema solar y más allá. Desde el estudio de la habitabilidad de Marte, la exploración de "mundos oceánicos" prometedores, como Titán y Europa, hasta la identificación de planetas del tamaño de la Tierra alrededor de estrellas distantes, nuestras misiones científicas están trabajando juntas con el objetivo de encontrar signos inconfundibles de vida más allá de la Tierra (un campo de la ciencia llamada astrobiología).
Mediante el estudio de la astrobiología, la NASA invierte en comprender los orígenes, la evolución y los límites de la vida en la Tierra. Este trabajo ha sido importante para dar forma a las ideas sobre dónde enfocar los esfuerzos de búsqueda de la vida. A medida que la NASA explora el sistema solar, nuestra comprensión de la vida en la Tierra y el potencial de vida en otros mundos ha cambiado junto con los numerosos descubrimientos. El estudio de organismos en ambientes extremos en la Tierra, desde la meseta polar de la Antártida hasta las profundidades del océano, ha puesto de relieve que la vida tal como la conocemos es altamente adaptable, pero no siempre fácil de encontrar. La búsqueda de vida requiere mucho cuidado y se basa en el conocimiento que obtenemos al estudiar la vida en la Tierra a través de la lente de la astrobiología. Si hay algo ahí fuera, es posible que todavía no sepamos cómo reconocerlo.
Misiones pasadas
Viking 1 y 2
Hace más de 45 años, el Proyecto Viking encontró un lugar en la historia cuando se convirtió en la primera misión de Estados Unidos en aterrizar una nave espacial de manera segura en la superficie de Marte.
Viking 1 y 2, cada uno compuesto por un orbitador y un módulo de aterrizaje, fueron el primer intento de la NASA de buscar vida en otro planeta y, por lo tanto, la primera misión dedicada a la astrobiología. Los experimentos biológicos de la misión revelaron una actividad química inesperada en el suelo marciano, pero no proporcionaron pruebas claras de la presencia de microorganismos vivos cerca de los lugares de aterrizaje.
Galileo
La misión Galileo de la NASA orbitó Júpiter durante casi ocho años y pasó cerca de todas sus lunas principales. Galileo arrojó datos que continúan dando forma a la ciencia de la astrobiología, en particular el descubrimiento de que la luna helada de Júpiter, Europa, tiene evidencia de un océano subterráneo con más agua que la cantidad total de agua líquida que se encuentra en la Tierra. Estos hallazgos también ampliaron la búsqueda de entornos habitables fuera de la "zona habitable" tradicional de un sistema, la distancia desde una estrella a la que el agua líquida puede persistir en la superficie de un planeta.
Cassini
Durante más de una década, la nave espacial Cassini compartió las maravillas de Saturno y su familia de lunas heladas, llevándonos a mundos asombrosos y ampliando nuestra comprensión de los tipos de mundos en los que podría existir vida.
Por primera vez, los astrobiólogos pudieron ver a través de la espesa atmósfera de Titán y estudiar la superficie de la luna, donde encontraron lagos y mares llenos de hidrocarburos líquidos. Los astrobiólogos están estudiando lo que estos hidrocarburos líquidos podrían significar para el potencial de vida en Titán. Cassini también fue testigo de la erupción de penachos helados de Encelado, la pequeña luna de Saturno. Al volar a través de las plumas, la nave espacial encontró evidencia de agua salada y químicos orgánicos. Esto generó dudas sobre si podrían existir ambientes habitables debajo de la superficie de Encelado.
Spirit y Opportunity Mars Exploration Rovers
Los rovers gemelos de exploración de Marte de la NASA, Spirit y Opportunity, se lanzaron hacia Marte en 2003 en busca de respuestas sobre la historia del agua en Marte. Originalmente una misión principal de tres meses, ambos exploradores robóticos sobrevivieron con creces sus misiones originales y pasaron años recopilando datos en la superficie de Marte.
Spirit y Opportunity fueron la primera misión para probar que el agua líquida, un ingrediente clave para la vida, había fluido una vez a través de la superficie de Marte. Sus hallazgos moldearon nuestra comprensión de la geología de Marte y los entornos pasados, y sugirieron de manera importante que los entornos antiguos de Marte alguna vez pudieron haber sido adecuados para la vida.
Kepler y K2
La primera misión de búsqueda de planetas de la NASA, el Telescopio Espacial Kepler, allanó el camino para nuestra búsqueda de vida en el sistema solar y más allá. Una parte importante del trabajo de Kepler fue la identificación de planetas del tamaño de la Tierra alrededor de estrellas distantes.
Después de nueve años en el espacio profundo, recopilando datos que indican que nuestro cielo está lleno de miles de millones de planetas ocultos, más planetas incluso que estrellas, el telescopio espacial se retiró en 2018. Kepler dejó un legado de más de 2.600 descubrimientos de exoplanetas, muchos de los cuales podrían ser lugares prometedores para la vida.
Spitzer
Durante sus dieciséis años en el espacio, el Telescopio Espacial Spitzer se convirtió en una herramienta principal para estudiar exoplanetas, utilizando su vista infrarroja del universo. Spitzer marcó una nueva era en la ciencia planetaria como uno de los primeros telescopios en detectar directamente la luz de las atmósferas de los planetas fuera del sistema solar, o exoplanetas. Esto permitió a los científicos estudiar la composición de esas atmósferas e incluso aprender sobre el clima en estos mundos distantes.
Los instrumentos infrarrojos de Spitzer permitieron a los científicos observar las regiones cósmicas que están ocultas a los telescopios ópticos, incluidos los polvorientos viveros estelares, los centros de las galaxias y los sistemas planetarios de nueva formación. Los ojos infrarrojos de Spitzer también permitieron a los astrónomos ver objetos más fríos en el espacio, como estrellas fallidas (enanas marrones), planetas extrasolares, nubes moleculares gigantes y moléculas orgánicas que pueden contener el secreto de la vida en otros planetas.
Misiones actuales
Hubble
Desde su lanzamiento en 1990, el telescopio espacial Hubble ha hecho inmensas contribuciones a la astrobiología. Los astrónomos utilizaron el Hubble para realizar las primeras mediciones de la composición atmosférica de los planetas extrasolares, y el Hubble ahora está caracterizando vigorosamente las atmósferas de exoplanetas con componentes como sodio, hidrógeno y vapor de agua. Las observaciones del Hubble también están proporcionando pistas sobre cómo se forman los planetas, a través de estudios de discos de polvo y escombros alrededor de estrellas jóvenes.
No todas las contribuciones de Hubble involucran objetivos distantes. El Hubble también se ha utilizado para estudiar cuerpos dentro del sistema solar, incluidos asteroides, cometas, planetas y lunas, como las intrigantes lunas heladas de Europa y Ganímedes. Hubble ha proporcionado información invaluable sobre el potencial de la vida en el sistema solar y más allá.
MAVEN
La misión de detección de la atmósfera de Marte, Atmósfera y Evolución Volátil (MAVEN) de la NASA se lanzó en noviembre de 2013 y comenzó a orbitar Marte aproximadamente un año después. Desde entonces, la misión ha realizado contribuciones fundamentales para comprender la historia de la atmósfera y el clima marcianos.
Los astrobiólogos están trabajando con estos datos atmosféricos para comprender mejor cómo y cuándo Marte perdió su agua e identificar períodos en la historia de Marte en los que era más probable que existieran entornos habitables en la superficie del planeta.
Mars Odyssey
Durante dos décadas, la Mars Odyssey de la NASA, la nave espacial más longeva del Planeta Rojo, ha ayudado a localizar hielo, evaluar los lugares de aterrizaje y estudiar las misteriosas lunas del planeta.
Odyssey ha proporcionado mapas globales de elementos químicos y minerales que componen la superficie de Marte. Los astrobiólogos utilizan estos mapas detallados para determinar la evolución del medio ambiente marciano y su potencial de vida.
Orbitador de reconocimiento de Marte
El Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) de la NASA está buscando evidencia de que el agua persistió en la superficie de Marte durante un largo período de tiempo. Si bien otras misiones a Marte han demostrado que el agua fluyó a través de la superficie en la historia de Marte, sigue siendo un misterio si el agua estuvo presente el tiempo suficiente para proporcionar un hábitat para la vida.
Los datos de MRO son esenciales para los astrobiólogos que estudian el potencial de entornos habitables en el pasado y el presente de Marte. Además, estos estudios son importantes en la construcción de modelos climáticos para Marte y para su uso en estudios de planetología comparativa para la habitabilidad potencial de exoplanetas que orbitan estrellas distantes.
Curiosity Mars Rover
El rover Curiosity Mars está estudiando si Marte alguna vez tuvo entornos capaces de sustentar la vida microbiana. En otras palabras, su misión es determinar si el planeta tenía todos los ingredientes que la vida necesita, como agua, carbono y una fuente de energía, mediante el estudio de su clima y geología.
Han pasado casi nueve años desde que Curiosity aterrizó en Marte en 2012, y el geólogo robot sigue haciendo nuevos descubrimientos. La curiosidad proporcionó evidencia de que los lagos de agua dulce llenaron Gale Grater hace miles de millones de años. Los lagos y las aguas subterráneas persistieron durante millones de años y contenían todos los elementos clave necesarios para la vida, lo que demuestra que Marte alguna vez fue habitable.
Misión TESS
El satélite de estudio de exoplanetas en tránsito (TESS) es el siguiente paso en la búsqueda de planetas fuera de nuestro sistema solar, incluidos aquellos que podrían albergar vida. Lanzado en 2018, TESS tiene la misión de estudiar todo el cielo y se espera que descubra y catalogue miles de exoplanetas alrededor de estrellas brillantes cercanas.
Hasta la fecha, TESS ha descubierto más de 120 exoplanetas confirmados y más de 2.600 planetas candidatos. El cazador de planetas continuará encontrando objetivos de exoplanetas que el próximo telescopio espacial James Webb de la NASA estudiará con más detalle.
Perseverancia Mars Rover
El robot astrobiólogo más nuevo de la NASA, el rover Perseverance Mars, aterrizó de manera segura en Marte el 18 de febrero de 2021 y está iniciando una nueva era de exploración en el Planeta Rojo. La perseverancia buscará signos de vida microbiana antigua, lo que hará avanzar la búsqueda de la agencia para explorar la habitabilidad pasada de Marte.
Lo que realmente distingue a esta misión es que el rover tiene un taladro para recolectar muestras de núcleos de roca y suelo marcianos, y las almacenará en tubos sellados para que las recoja una futura misión de retorno de muestras a Marte que las transportaría de regreso a la Tierra para un análisis detallado.
InSight de la NASA detecta dos terremotos considerables en Marte
Los temblores de magnitud 3.3 y 3.1 se originaron en una región llamada Cerberus Fossae, lo que respalda aún más la idea de que esta ubicación es sísmicamente activa.
El módulo de aterrizaje InSight de la NASA ha detectado dos terremotos fuertes y claros que se originan en una ubicación de Marte llamada Cerberus Fossae, el mismo lugar donde se vieron dos terremotos fuertes anteriormente en la misión. Los nuevos terremotos tienen magnitudes de 3.3 y 3.1 y los terremotos anteriores fueron de magnitud 3,6 y 3,5. InSight ha registrado más de 500 terremotos hasta la fecha, pero debido a sus señales claras, estos son cuatro de los mejores registros de terremotos para sondear el interior del planeta.
El estudio de los martemotos es una de las formas en que el equipo científico de InSight busca desarrollar una mejor comprensión del manto y el núcleo de Marte. El planeta no tiene placas tectónicas como la Tierra, pero tiene regiones volcánicamente activas que pueden causar retumbos. Los terremotos del 7 y 18 de marzo se añaden a la idea de que Cerberus Fossae es un centro de actividad sísmica.
“En el transcurso de la misión, hemos visto dos tipos diferentes de martemotos: uno que es más 'parecido a la Luna' y el otro, más 'parecido a la Tierra'”, dijo Taichi Kawamura del Institut de Physique du Globe, que ayudó a proporcionar el sismómetro de InSight y distribuye sus datos junto con la universidad de investigación suiza ETH Zurich. Las ondas de los terremotos viajan más directamente a través del planeta, mientras que las de los terremotos lunares tienden a estar muy dispersas; los martemotos caen en algún punto intermedio. "Curiosamente", continuó Kawamura, "estos cuatro terremotos más grandes, que provienen de Cerberus Fossae, son 'similares a la Tierra'".
Los nuevos terremotos tienen algo más en común con los principales eventos sísmicos anteriores de InSight, que ocurrieron hace casi un año marciano completo: ocurrieron en el verano del norte de Marte. Los científicos habían predicho que este sería nuevamente un momento ideal para escuchar los terremotos porque los vientos se volverían más tranquilos. El sismómetro, llamado Experimento Sísmico para Estructura Interior, es lo suficientemente sensible, incluso cuando está cubierto por un escudo en forma de cúpula para bloquearlo del viento y evitar que se enfríe demasiado, el viento aún causa suficiente vibración para oscurecer algunos martemotos.
El módulo de aterrizaje InSight de la NASA usó una pala en su brazo robótico para comenzar a gotear tierra sobre el cable que conecta su sismómetro a la nave espacial el 14 de marzo de 2021, el 816 ° día marciano, o sol de la misión. Los científicos esperan que aislarlo del viento facilite la detección de maremotos.
Créditos: NASA / JPL-Caltech
Mejor detección
Es posible que los vientos se hayan calmado, pero los científicos aún esperan mejorar su capacidad de "escuchar". Las temperaturas cerca del módulo de aterrizaje InSight pueden oscilar desde casi menos 100 grados Celsius por la noche a 0 grados Celsius durante el día. Estas variaciones extremas de temperatura pueden estar causando que el cable que conecta el sismómetro al módulo de aterrizaje se expanda y contraiga, dando como resultado sonidos de estallido y picos en los datos.
Entonces, el equipo de la misión ha comenzado a intentar aislar parcialmente el cable del clima. Comenzaron usando la pala en el extremo del brazo robótico de InSight para dejar caer tierra sobre el escudo térmico y contra el viento abovedado, lo que permite que gotee hacia el cable. Eso permite que el suelo se acerque lo más posible al escudo sin interferir con el sello del escudo con el suelo. Enterrar la atadura sísmica es, de hecho, uno de los objetivos de la siguiente fase de la misión, que la NASA extendió recientemente por dos años, hasta diciembre de 2022.
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A pesar de los vientos que han sacudido el sismómetro, los paneles solares de InSight permanecen cubiertos de polvo y la energía disminuye a medida que Marte se aleja del Sol. Se espera que los niveles de energía mejoren después de julio, cuando el planeta comience a acercarse nuevamente al Sol. Hasta entonces, la misión apagará sucesivamente los instrumentos del módulo de aterrizaje para que InSight pueda hibernar, despertando periódicamente para comprobar su salud y comunicarse con la Tierra.
El equipo espera mantener el sismómetro encendido durante uno o dos meses más antes de que tenga que ser apagado temporalmente.
El Hubble captura una estrella gigante al borde de la destrucción
Para celebrar el 31 aniversario del lanzamiento del Telescopio Espacial Hubble de la NASA, los astrónomos apuntaron el famoso observatorio a una brillante "estrella famosa", una de las estrellas más brillantes que se ven en nuestra galaxia, rodeada por un halo resplandeciente de gas y polvo.
La estrella, llamada AG Carinae, está librando un tira y afloja entre la gravedad y la radiación para evitar la autodestrucción.
La capa en expansión de gas y polvo que rodea a la estrella tiene unos cinco años luz de ancho, lo que equivale a la distancia desde aquí hasta la estrella más cercana más allá del Sol, Proxima Centauri.
La enorme estructura se creó a partir de una o más erupciones gigantes hace unos 10.000 años. Las capas exteriores de la estrella volaron al espacio, como una tetera hirviendo que se desprende de su tapa y el material expulsado equivale aproximadamente a 10 veces la masa de nuestro Sol.
Estos estallidos son la vida típica de una rara raza de estrellas llamada variable azul luminosa, una breve fase convulsiva en la corta vida de una estrella ultrabrillante y glamorosa que vive rápido y muere joven. Estas estrellas se encuentran entre las estrellas más masivas y brillantes conocidas. Viven solo unos pocos millones de años, en comparación con los aproximadamente 10 mil millones de años de vida de nuestro Sol. AG Carinae tiene unos pocos millones de años y reside a 20.000 años luz de distancia dentro de nuestra galaxia, la Vía Láctea.
Las variables azules luminosas exhiben una personalidad dual: parecen pasar años en una dicha inactiva y luego estallan en un arrebato petulante. Estos gigantes son estrellas en extremo, muy diferentes de las estrellas normales como nuestro Sol. De hecho, se estima que AG Carinae es hasta 70 veces más masivo que nuestro Sol y brilla con el brillo cegador de un millón de soles.
Grandes estallidos como el que produjo la nebulosa ocurren una o dos veces durante la vida de una variable azul luminosa. Una estrella variable azul luminosa solo arroja material cuando está en peligro de autodestrucción como supernova. Debido a sus formas masivas y temperaturas súper calientes, las estrellas variables azules luminosas como AG Carinae están en una batalla constante para mantener la estabilidad.
Es una lucha de brazos abiertos entre la presión de la radiación desde el interior de la estrella que empuja hacia afuera y la gravedad que empuja hacia adentro. Esta coincidencia cósmica da como resultado que la estrella se expanda y contraiga. La presión exterior ocasionalmente gana la batalla, y la estrella se expande a un tamaño tan inmenso que se desprende de sus capas externas, como un volcán en erupción. Pero este arrebato solo ocurre cuando la estrella está a punto de desmoronarse. Después de que la estrella expulsa el material, se contrae a su tamaño normal, vuelve a asentarse y se vuelve inactivo por un tiempo.
Como muchas otras variables azules luminosas, AG Carinae permanece inestable. Ha experimentado estallidos menores que no han sido tan poderosos como el que creó la nebulosa actual.
Aunque AG Carinae está inactiva ahora, como una estrella supercaliente, continúa emitiendo una radiación abrasadora y un poderoso viento estelar (corrientes de partículas cargadas). Este flujo de salida continúa dando forma a la antigua nebulosa, esculpiendo estructuras intrincadas a medida que el gas que fluye choca con la nebulosa exterior de movimiento más lento. El viento viaja a una velocidad de hasta 670.000 millas por hora (un millón de km / h), unas 10 veces más rápido que la nebulosa en expansión. Con el tiempo, el viento caliente alcanza el material expulsado más frío, lo golpea y lo aleja más de la estrella. Este efecto de "quitanieves" ha despejado una cavidad alrededor de la estrella.
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El material rojo es gas hidrógeno incandescente mezclado con gas nitrógeno. El material rojo difuso en la parte superior izquierda señala donde el viento ha atravesado una región tenue de material y lo ha llevado al espacio.
Las características más destacadas, resaltadas en azul, son estructuras filamentosas con forma de renacuajos y burbujas torcidas. Estas estructuras son masas de polvo iluminadas por la luz reflejada de la estrella. Las características en forma de renacuajo, más prominentes a la izquierda y al fondo, son acumulaciones de polvo más densas que han sido esculpidas por el viento estelar. La aguda visión del Hubble revela estas estructuras de aspecto delicado con gran detalle.
La imagen fue tomada con luz visible y ultravioleta. La luz ultravioleta ofrece una vista un poco más clara de las estructuras de polvo filamentoso que se extienden hasta la estrella. El Hubble es ideal para observaciones de luz ultravioleta porque este rango de longitud de onda solo se puede ver desde el espacio.
Las estrellas masivas, como AG Carinae, son importantes para los astrónomos debido a sus efectos de largo alcance en su entorno. El programa más grande en la historia del Hubble, la Biblioteca del Legado Ultravioleta de Estrellas Jóvenes como Estándares Esenciales, está estudiando la luz ultravioleta de las estrellas jóvenes y la forma en que dan forma a su entorno.
Las estrellas variables azules luminosas son raras: se conocen menos de 50 entre las galaxias de nuestro grupo local de galaxias vecinas. Estas estrellas pasan decenas de miles de años en esta fase, un abrir y cerrar de ojos en el tiempo cósmico. Se espera que muchos terminen sus vidas en explosiones titánicas de supernovas, que enriquecen el universo con elementos más pesados más allá del hierro.
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